Historia de la Delegación Álvaro Obregón, Ciudad de México
Abarca 236 colonias que cuentan entre su patrimonio cultural lo mismo pueblos coloniales que edificios históricos o artísticos o centros comerciales modernos y antiguas fábricas textiles. Estos asentamientos se desarrollaron al abarcar los pueblos de Santa Lucía, Santa María Nonoalco, Santa Rosa Xochiac, Tetelpan, Santa Fe, Tizapán, Axotla, Tlacopac, San Ángel, Tenanitla, Chimalistac y San Bartolo Ameyalco.
Es curioso descubrir que en el lugar donde se ubicaba la Hacienda Santa Ana, establecida alrededor de 1692, y que en 1776 pasó a ser la hacienda Coicochea, estuvo la sede de la Universidad Iberoamericana y ahora da servicio el restaurante San Ángel Inn. Tambie´n es interesante saber que en los extensos campos de la antigua hacienda del Olivar de los Padres, ahora se encuentra la colonia del mismo nombre.
En el siglo XIX en esta zona se instalaron algunas fábricas como La Alpina, La Hormiga y Loreto. Su desarrollo hizo que el antiguo pueblo de Tizapán dejara de ser un lugar dedicado a la agricultura, para dar cabida a viviendas y comercios hasta transformarse en una zona urbana. El trazo de las avenidas Revolución e Insurgentes dividió la antigua huerta del Convento del Carmen y separó las capillas del Secreto y de Chimalistac.
En 1906 la Hacienda Goicochea fue adquirida por la San Angel Land Company, de la United States Mexican Trust Company, que la fraccionó para crear la colonia Altavista que colindaba al oriente con el pueblo de Tlacopac y al sur con terrenos de la Hacienda de guadalupe. El lugar se convirtió en un área de descanso de las familias adineradas de la Ciudad de México.
Los habitantes de la Delegación Álvaro Obregón cuentan con varios museos y centros culturales como la Casa Jaime Sabines, en Avenida Revolución, la Casa del Risco, donde funciona el Centro Cultural Isidro Fabela, a unos pasos del Bazar del Sábado en la Plaza de San Jacinto, convertida en jardín del arte los fines de semana, y el Centro de Estudios de Historia de México CARSO que resguarda el archivo de Agustín de Iturbide. Sobre avenida Revolución se encuentran el Museo Regional del Carmen y el Museo de Arte Carrillo Gil.
En los años treinta, el arquitecto Juan O’Gorman construyó en San Ángel, la Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, donde ambos artistas vivieron y produjeron parte esencial de su obra.
Tenanitla significa “junto a los muros de piedra”. Los frailes dominicos edificaron ahí una capilla dedicada a Santo Domingo, que tiempo después tomó el nombre de San Jacinto Tenanitla y actualmente se conoce como la iglesia de San Jacinto, ubicada a unas cuadras de donde se coloca el Bazar del Sábado. A comienzos del siglo XVII llegaron a este sitio los carmelitas descalzos, quienes fundaron el Colegio y Convento de San Ángelo Mártir, en los terrenos que iban de San Jacinto al pueblo de Chimalistac. Fue la influencia del convento lo que dio origen al nombre de San Ángel y desplazó al de Tenanitla. En 1848, en una de las casas contiguas a la iglesia de San Jacinto fue fusilado un grupo de soldados de origen irlandés que desertaron del ejército de Estados Unidos para unirse a los mexicanos que enfrentaban a los invasores yanquis. Los mártires pertenecían al Batallón de San Patricio y una placa de bronce lo consigna. Las calles de San Ángel están empedradas como en la época en que se construyeron las primeras mansiones solariegas que aún perduran, como la de Mayorazgo de Fagoaga, la de los Condes del Valle Oploca, la Casa del Risco, la Casa del Obispo Madrid y la Quinta Aldiztegi. Se conservan en muy buen estado el ex convento del Carmen y la iglesia de San Jacinto, ffamosa por su hermoso retablo barroco. Todavía son muy concurridas la Feria de las Flores y la fiesta de la Virgen del Carmen.
Chimalistac se ubica cerca de San Ángel y su nombre es “lugar de escudos blancos”. La capilla de San Sebastián erigida por los carmelitas descalzos hacia 1585 se encuentra en la Plaza Federico Gamboa, y su retablo interior fue trasladado ahí desde el templo de La Piedad en 1941. Uno de los personajes que habitaron esta población fue el escritor Federico Gamboa, cuya casa ahora es una biblioteca, se localiza frente a la plaza que lleva su nombre. Otro monumento importante de la zona es el dedicado al general Álvaro Obregón. Se encuentra en el lugar en que estaba el restaurante La Bombilla, sitio en el que fue asesinado por José de León Toral, miembro de una organización católica radical, en 1928, y donde se exhibió durante el resto del siglo XX la mano que el divisionario perdió en la Batalla de Celaya. Cuatro años después del magnicidio, el entonces presidente Pascual Ortiz Rubio emitió un decreto para cambiar el nombre de la delegación San Ángel al de Villa o Ciudad Álvaro Obregón, para honrar al ex presidente y revolucionario. En diciembre de 1970 un decreto estableció 16 delegaciones políticas, a partir del cual esta demarcación lleva el nombre de Álvaro Obregón.
En Chimalistac pasaba el río Chico, y puede verse su curso por el Paseo del Río y observarse los puentes de piedra que lo atravesaban. En 1923, la plaza de Chimalistac fue llamada Federico Gamboa, como homenaje al autor de la novela Santa, ya que ese pueblo, su gente, paisaje y lugares habían inspirado al escritor. Las calles aledañas recibieron el nombre de sus personajes principales: Santa e Hipólito.
Al sur poniente de San Ángel se localiza el pueblo de Tizapán, uno de los que mejor conservan sus tradiciones, festividades y arquitectura. Su nombre significa ” sobre tiza”. Se dice que los mexicas fueron enviados a este lugar para que las serpientes que había entonces los aniquilaran, pero sucedió que ellos se las comieron.
En el siglo XVI, Tizapán fue evangelizado por los dominicos, la ermita ahí edificada se trasformó en el siglo XVIII en la capilla de Nuestra Señora de Guadalupe. El 30 de noviembre de 1933, el templo del mismo nombre fue declarado Monumento Nacional. A pesar de haber iniciado su construcción en el siglo XVI, la portada se terminó a finales del siglo XVIII. En su paisaje sobresalía una cascada que fue de gran importancia para el establecimiento de las fábricas textiles La Hormiga y La Abeja. Por sus árboles frutales, huertas, el río La Magdalena y su vegetación, Tizapán era un sitio de paseo y reposo al que acudían los habitantes de San Ángel. Entre sus casonas destaca la Quinta Victoria, por su singular torre de tabique rojo rematada en forma cónica. También es importante el Parque del Federalismo El Batán, ya que ahí se encuentra la fuente de mosaico de colores “Espejo de la estrella”, cuya realización fue encargada a Diego Rivera por Dolores Olmedo.
El pueblo de Santa Fe de los Altos fue fundado en el sitio prehispánico de Acaxóchic. Entre 1531 y 1532, Vasco de Quiroga desarrolló ahí un proyecto de asistencia social para los indígenas, una casa de cuna para huérfanos, un colegio donde se enseñaba a los indios a leer, escribir, cantar y tocar instrumentos musicales, y un hospital para pobres. La parroquia de nuestra Señora de la Asunción, que data del siglo XVII, muestra una portada clasicista rematada con un frontón triangular. En su atrio figura la imagen en bronce de Vasco de Quiroga. Otro sitio que da testimonio de tiempos remotos es la Real Fábrica de Pólvora establecida en Santa Fe debido a la existencia de suficiente materia prima en los bosques y abundante agua para la molienda de la pólvora. Hoy esta factoría forma parte del Campo Militar No. 1 y cuenta con un museo donde se exponen las herramientas utilizadas para fabricar armas y pólvora. Ahí se encuentra el inicio del famoso acueducto de Santa Fe, que fue terminado el 11 de julio de 1773.
A comienzos de los años ochenta del siglo XX se renovó la zona de los tiraderos de Santa Fe, y nació un desarrollo urbano en el que se encuentran sedes de la Universidad Iberoamericana y del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, así como varios rascacielos que alojan corporativos trasnacionales y mexicanos, además de un gran centro comercial con estacionamiento para más de 5 mil vehículos.
El proyecto de reordenamiento vial de la Ciudad de México incluyó una serie de puentes y avenidas que llevan los nombres de Octavio Paz, Carlos Pellicer y Jaime Sabines, y que atraviesan las barrancas de la delegación para conectar el tramo surponiente con el norte, a fin de agilizar el tránsito desde San Jerónimo hasta la autopista México-Toluca. De la misma manera, el segundo piso del Anillo Periférico fue trazado sobre varios tramos de la delegación, y desde su altura pueden contemplarse no sólo algunas casas de época, sino las hermosas frondas de sus árboles centenarios.
El pueblo de Axotla significa “lugar de ajolotes” y está delimitado por la Avenida Rio Mixcoac, Avenida Universidad, Hortensias y Moras. Axotla era una población agrícola unida a las haciendas de Guadalupe, San Pedro y San José. En esta zona había muchos huertos, magueyes y hornos de tabique. El Templo de San Sebastián Axotla fue fundado por los dominicos en el siglo XVI, presenta una portada tallada en piedra, de indiscutible calidad, en la que se aprecia la mano de obra indígena. El santo patrono de Axotla es San Andrés Mártir.
En el centro del pueblo de Axotla surgió en los años cincuentas del siglo pasado la colonia Florida, que se extiende prácticamente desde el extremo sur de Chimalistac, hasta la colonia Insurgentes-Mixcoac. En su extremo norte colinda con Barranca del Muerto, y con Coyoacán en su extremo oriental. Las calles de la colonia tienen nombres de flores: Hortensias, Margaritas, Camelias, etc. Esta es una zona residencial de gran belleza, apacible, poco transitada, con árboles añejos y calles y callejones empedrados.
El nombre del pueblo San Bartolo Ameyalco significa “en el manantial”. Fue un barrio que perteneció al pueblo de Coyoacán y que distaba de éste 11 kilómetros. El primero de septiembre de 1932, el templo de San Bartolo, que data del siglo XVII, fue reconocido como Monumento Nacional.
El barrio de Santa Lucía dependía de Coyoacán, a donde enviaba tributos y mano de obra. En sus construcciones antiguas se aprecia la modesta arquitectura vernácula. Aún se conserva el Palacio Municipal, hoy Casa de Cultura, y sus habitantes mantienen el amor por las festividades tradicionales. El templo de Santa Lucía data del siglo XX, y su portada sencilla remata en una moldura triangular.
Santa María Nonoalco formó parte de las tierras que pertenecían a Hernán Cortés y era un barrio más de Coyoacán. En pleno siglo XX, Santa MAría sufrió varios cambios, uno de ellos debido a las obras de construcción del Anillo Periférico. La parroquia de la Asunción Nonoalco data del siglo XVI y cuenta con un amplio atrio delimitado por una barda de arcos invertidos, cuyo acceso se realiza a través de una hermosa portada de tres arcos.
Tetelpan significa “en los montones de piedra” y se localiza en el kilómetro 17.5 del camino al Parque Nacional Desierto de los Leones. Su antigüedad se remonta al año 700 a.C. y corresponde al periodoconocido como Preclásico Superior. Aún se conservan algunos vestigios arqueológicos cercanos al templo y en las casas de varios vecinos que los han guardado celosamente y que han levantado allí una zona habitacional. Durante la época colonial, cambió su nombre por el de Santa María de la Natividad. Su templo se comenzó a construir a finales del siglo XVI, y fue remodelado en 1930 con un proyecto del arquitecto Juan O’Gorman.
Tlacopac significa “lugar de jarillos” y se ubica a un kilómetro al norte de San Ángel. en este lugar, habitado por floricultores y fruticultores desde antes de que llegaran los españoles, los dominicos construyeron una capilla. Todavía a mediados del siglo XX existían grandes huertos de flores y una arquitectura modesta que la llevaron a ser considerada como zona típica y pintoresca.
La colonia Guadalupe Inn surgió a mediados de los años cincuenta del siglo pasado y se localiza a la misma altura que La Florida, sólo que en el perímetro comprendido entre las avenidas Revolución e Insurgentes. Al norte limita con Barranca del Muerto y al sur con la Avenida Altavista. Esta colonia se desarrolló en los terrenos de la antigua hacienda de Guadalupe que pertenecía a José de Teresa. Se caracteriza porque sus calles están dedicadas a compositores mexicanos como Jaime Nunó, Manuel M. Ponce y Silvestre Revueltas.
San Ángel Inn, Tlacopac y Las Flores tienen calles empedradas y sus construcciones son de tipo rústico-colonial. Hace apenas 40 años por estas tres colonias pasaba el río San Ángel, que provenía del Desierto de los Leones para después incorporarse al río Mixcoac, actualmente entubado. Sobre el lecho del río se trazó una calle empedrada a la que se le dio el nombre del poeta español trasterrado León Felipe.
En la zona poniente de la Delegación Álvaro Obregón, entre Centenario, Molinos, Barranca del Muerto y Olivar del Conde, donde se extraían arena, minerales y otros materiales utilizados en la construcción, surgieron las colonias irregulares Presidentes y Golondrinas, así como parte de la Unidad Habitacional y La Presa.