Ocupa una extensión cercana a los 4000 kilómetros cuadrados y es parte de una de las regiones hidrológicas más importantes del país debido a los ríos que allí desembocan.
Sus aguas están pobladas de conjuntos de manglares, principalmente en su sector sureste, donde anidan diversas especies de aves marinas, como las garzas, la cigüeña jabirú, ocasionalmente pelícanos y gaviotas, que conviven pacíficamente con algunos lagartos que han logrado sobrevivir al deterioro ambiental. La laguna se encuentra dentro del programa de Áreas de Protección de Flora y Fauna.
Aunque se trata de una cuenca casi cerrada, las dos bocas en los extremos de la Isla del Carmen se encargan de comunicar la laguna con el mar. Entra entonces una porción del Golfo de México, y su salinidad se mezcla con el agua dulce de las pequeñas lagunas litorales y las descargas del estuario de Sabancuy y el río Mamantel, las del río Candelaria y el Chumpán, también las del río San Pedro y San Pablo, y sobre todo las del río Palizada. Poco sorprende que en ese universo compuesto de humedales existan selvas, palmares, bosques de manglares, pastos marinos y la vegetación que en las dunas costeras florece.
En medio de toda esa flora crecen lo mismo especies marinas que de agua dulce. Tiburones, mantarrayas, delfines pico de botella, manatíes, esmedregales, pámpanos, mojarras y pejelagartos circundan las aguas poco profundas de la laguna. Hay camarones y jaibas de distintas especies, cocodrilos y tortugas marinas. Las aves de paso encuentran aquí refugio y con algo de suerte es posible admirar la banda roja alrededor del cuello de la cigüeña jabirú o al halcón peregrino, ambos en peligro de extinción.
Ubicación: Se localiza en Ciudad del Carmen, 200 km al sur de la ciudad de Campeche por la carretera número 180.