Su nombre en zapoteco significa “fortaleza de guerra”. Fue un importante sitio emplazado en un cerro que rigió sobre el Valle de Etla durante el periodo Clásico, entre el 250 y el 800 d.C.
El lugar aún no ha sido explorado, pero ya pueden apreciarse basamentos piramidales, palacios, plazas, un juego de pelota y tumbas; la más importante de éstas es la número 5 por su decoración de mascarones de estuco, pinturas murales en la cámara mortuoria, estelas y una docena de jambas labradas y policromadas en el más puro estilo zapoteca.
Ubicado: A 27 km al noroeste de la ciudad de Oaxaca, por la carretera núm. 190, y a 2 km más al sureste del poblado de Santiago Súchel-Quitongo.