En la Ciudad de México hay de todo un poco, para cada gusto y para cada bolsillo. Seleccionar los lugares a los que puedes llevar a tu amigo o familiar extranjero y así presumirle tu ciudad puede resultar todo un reto.
Uno de los clásicos es un paseo por el Centro Histórico, ya que es el ideal para mostrar la riqueza arquitectónica de México. Aquí destaca la Catedral con su altar, retablos, capillas e historia. Se puede recorrer su campanario por menos de $20 pesos. También se puede visitar Palacio Nacional y conocer sus murales e historia que lo rodea. Las visitas guiadas son los fines de semana y dependiendo de los sitios que desees conocer inician desde $120 pesos. www.palacionacionalmexico.com
En el corredor peatonal de Avenida Madero podrá encontrar lugares para comer y para realizar compras, además de espectáculos callejeros.
Otra de las visitas típicas de la Ciudad de México es Xochimilco. Si entran por el embarcadero de Nativitas encontrarán un mercadito en el que se pueden conseguir artesanías típicas como muñecas, juguetes y ropa. Rentar una trajinera cuesta aproximadamente $800 pesos por dos horas, depende de cual se elija. Se puede llevar tu propia música, comida y bebida para amenizar el ambiente, aunque no falta la trajinera que vende quesadillas, flores o donde van los mariachis. El lanchero también hace el papel de guía de turistas, platicando un poco de los canales, sus historias, leyendas y lugares representativos, como la Isla de las Muñecas.
No puede faltar una visita al barrio de Coyoacán, uno de los puntos más conocidos es el Jardín Centenario y su fuente con estatuas de coyotes, alrededor de ella hay restaurantes y cafés. Muy cerca se encuentra el Bazar Artesanal donde se puede conseguir artesanías y piezas únicas de manos mexicanas.
En el Bazaar Sábado, en la Plaza San Jacinto de San Ángel pueden encontrar artesanos que desde hace más de 50 años venden piezas de primera mano como joyería y decoración para el hogar. También hay presentaciones artísticas de danza como bailes típicos.
Es imperdible una visita al Museo Nacional de Antropología e Historia, uno de los más impresionantes del mundo, según Francisco Madrid, director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac.
Para los amantes del mar es una buena opción ir al Sirenito Blu, ubicado en la calle de Pachuca 109, en la colonia Condesa. En este sitio se puede probar los tacos estilo ensenada, de pescado, los ceviches y las carnitas de atún, entre muchos otros platillos. Otra opción es el mercadito de Coyoacán, donde encontrarán las famosas Tostadas Coyoacán, hechas de camarón y ceviche. En el centro, arriba de la librería Porrúa se encuentra el restaurante El Mayor, donde además de la buena comida se puede disfrutar de una maravillosa vista de la zona arqueológica del Templo Mayor.
En la Avenida Álvaro Obregón número 40 se encuentra el restaurante Mog, que es una buena opción para los que prefieren la comida oriental, sus ensaladas, su sushi y guisados son muy buenos, pero lo que realmente lo hace memorable son sus postres. Uno de los´favoritos es el mil crepas.
Venir a México y no probar un buen taco es un pecado. Y por eso es recomendable probar los tacos de la Taquería el Borrego Viudo. El pastor y el tepache son en verdad para chuparse los dedos. Se encuentran en Avenida Revolución 241, y están abiertos hasta la madrugada. Otra opción es el Salón Corona, el original está localizado en la calle de Bolívar 24, pero posee varias sucursales. Además de tacos como los de adobo, mole verde, costilla y bistec, también se puede pedir una quesadilla, un caldito de camarón o una torta al pastor o de bacalao.
En el cruce de las avenidas Coyoacán y División del Norte se encuentra la taquería el Rey del Taco, famoso no sólo por sus tacos, sino por las flautas ahogadas en salsa verde picante. Para finalizar, un buen lugar para tomarse un trago y escuchar un poco de rock, es el bar Milán, ubicado en la calle de Milán 18, en la colonia Juárez. Aquí tu dinero lo usas para comprar “milagros”, que son billetes de juguete que cambias por bebidas. Su bebida más famosa es el mojito.
El centro de la ciudad se cambia por completo de noche. Al recorrer sitios como la Calle de Moneda y el Barrio de la Merced los guías podrán narrar leyendas de personajes que vivieron en esas calles. Escucharán historias como la del Indio Triste, el robo del Templo de la Merced y la hija no reconocida de Felipe II, enclaustrada en el Convento de Jesús María.