Erigido sobre una plataforma prehispánica en 1571 por el arquitecto Juan de Alameda.
Un gran atrio bardado preside al templo en cuya fachada se exhibe una escultura de San Francisco.
Destaca la torre churrigueresca a un costado de la iglesia.
En el interior, conserva un enorme retablo del siglo XVIII.
La Capilla del Santísimo posee una fachada en argamasa cubierta de vegetación y follajes de estilo indígena.
Se conserva una pila bautismal y muestras de pintura mural.