Sayulita se encuentra a los pies del Pacífico, con olas que conquistan a los surfistas, atardeceres que roban el aliento y camas para esconderse entre el mar, la selva y la montaña.
Sayulita lo tiene todo, y aquí te mostramos los mejores destinos para que tu viaje sea de descanso y placer.
Petit Hotel Hafa


Muebles de ratán, lámparas colgantes, textiles chiapanecos y corazones pintados en pisos o bordados en cojines, son la decoración de las seis habitaciones de este hermoso hotel boutique.
El diseño es de influencia marroquí y mediterránea. Posee una boutique de artesanías y joyería mexicana de diseño.
Su terraza es la más popular entre los surfistas, ya sea de día o de noche.
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Kupuri


Posee 22 habitaciones alrededor de una piscina rectangular y bajo un techo de palma tejido a mano.
En este sitio los huéspedes encuentran actividades y alimentación, equilibrio en cuerpo, alma y espíritu.
Imparten clases de surf y safaris fotográficos para avistar aves. De noviembre a marzo se hacen paseos para observar ballenas jorobadas.
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Villa Amor


Villa Amor se encuentra entre la bahía de Sayulita y la imponente Sierra Madre. Las villas tienen un diseño único, la cama puede estar bajo las estrellas si tú lo deseas, hay un dosel que te protege de los insectos.
La piedra es el elemento principal y se puede apreciar en los baños y jacuzzis.
Posee una variedad de terrazas con hamacas y camas colgantes, piscinas, restaurante y excursiones.
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Lola Hotel


Este es un hostal y dispone de cuartos compartidos y privados con terrazas y áreascomunes.
Este lugar es una paleta de color que va desde muros blancos impecables hasta techos en rosa mexicano o verde limón.
Se localiza a 200 metros de la playa y de la zona de restaurantes y bares.
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Playa Escondida


Posee 28 habitaciones alrededor de una caleta de agua cristalina con vistas a la playa, selva y la montaña.
Su arquitectura orgánica utiliza materiales de la región creando espacios íntimos dominados por la madera.
Su cocina gourmet está basada en pescados y mariscos frescos. Hay renta de bicicleta y senderos para pasear a caballo.
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Siete Lunas


Como su nombre lo dice, son siete habitaciones y todas con vista al Pacífico. en cada una destacan los techos de palma y las estructuras de madera.
La piscina está rodeada por camas de día y asoleaderos en medio de la selva.
Por las noches desde el jacuzzi se puede contemplar la luna llena sobre el mar.
Organizan recorridos en kayak, surf y tirolesas.
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Pájaro de Fuego

