Entre Guanajuato y Dolores se encuentra la Sierra de Santa Rosa con sus bosques de pino-encino y rincones encantadores como la Cañada de las Flores o el mirador del Cerro de la Vigilancia, además de las 172 especies de aves.
Aquí se practica ciclismo, senderismo temático y es posible acampar. La Sierra de Lobos es la continuación de esta serranía, entre León y San Felipe, que también cuenta con centros ecoturísticos.
Al sur se encuentran la Presa Solís, la Laguna de Yuriria y el LAgo de Cuitzeo, ideales para paseos en lancha. También están los cráteres volcánicos de Las Siete Luminarias, en Valle de Santiago. Algunos de ellos tienen en su interior milpas y lagos. El más vistoso de ellos es el llamado Hoya de Rincón de Parangueo.
En la Sierra Gorda se encuentra el Vergel de Bernalejo con sus peñas y sus grutas, el Puente de Dios, un túnel natural, y en la parte sur, las lomas de Tierra Blanca con sus cactáceas gigantes.
Todo esto es para disfrutar de paseos a caballo, recorridos en cuatrimotos, avistamiento de aves, vuelos en globo aerostático, en ultraligero, senderismo, ciclismo de montaña y campismo.