Esta antigua hacienda perteneció a Juan Lencero, un soldado de Hernán Cortés. Originalmente era una venta que recibía a los viajeros que paraban entre Veracruz y la Ciudad de México.
Llama la atención su capilla colonial, después del cuarto reformado conocido como Casa de las Monjas. La propiedad tiene una gran sorpresa para quienes visitan la casona principal, hoy museo. La hacienda tuvo innumerables propietarios a través de su historia, el más conocido fue Antonio López de Santa Anna. El premio Nobel de literatura, Gabriela Mistral, pasó largas temporadas aquí, acompañada de las escritoras Rosario Castellanos y Emma Godoy.
Actualmente la casona principal alberga un museo con mobiliario original del siglo XIX que retrata cómo se distribuían las casas en esas épocas. Ahí verá una cama que se presume perteneció a Santa Anna. Una de las salas preferidas es la de música, donde puede admirar un arpa francesa mandada a hacer por una familia de Orleans para un zar de la corona rusa y que extrañamente se encontró en México, un piano de mediados del siglo XIX y otros instrumentos centenarios. En la sala de juegos hay una mesa de billar de 1930 con bolas de marfil, y en la sala de armas verá enmarcado un bono de 500 dólares americanos de 1866, préstamo personal otorgado a Santa Anna. Afuera nadan cisnes en un yacimiento natural que fue acondicionado como alberca alrededor de 1940.
Se puede llegar en auto pero si prefiere, en Xalapa, por la avenida Lázaro Cárdenas pasan los autobuses que paran enfrente del museo.
