Durante la primera década de este siglo, Azcapotzalco tuvo un auge debido al crecimiento de la ciudad capital.
Durante el porfiriato la colonia El Imparcial se levantó en terrenos de la antigua hacienda de Clavería, caracterizada por los placeres afrancesados que se edificaron. Esta hacienda fue una de las más famosas que se encontraban alrededor de la Ciudad de México desde el siglo XVII; en sus terrenos se cultivaba una gran cantidad de hortalizas y magueyales, y se distinguía por su industria ganadera.
Con la llegada del siglo XX, los campos de labor cedieron paso a la zona urbana, de tal manera que la original colonia Clavería, sitio en donde podemos observar en sus inmuebles distintos estilos arquitectónicos, desde el antiguo casco de la hacienda, hasta modernos edificios, pasando por el art decó y el barroco californiano.