Variados y muy interesantes aspectos geológicos, prehistóricos, arqueológicos, históricos de la región de Durango conocerá el visitante en este recinto. Deberá considerar cuando menos dos horas para poder admirar a detalle su significativo acervo.
El museo ocupa una residencia señorial afrancesada erigida hacia 1899 por el ingeniero Stanislao Slomecky. Se construyó en una huerta donde existía un gran árbol de aguacate, de ahí le viene al inmueble el sobrenombre de Casa del Aguacate. Después de haber servido a diversos usos fue acondicionada para museo, el cual se inauguró en 1990.
Se inicia el recorrido en la sala dedicada a Pancho Villa: “un museo en Durango sin Villa no es museo”. Destaca ahí un enorme mural alusivo a diversas etapas de su vida: su mascarilla mortuoria, un busto ejecutado por Gabriel Ponzanelli y una fotografía de Villa con niños y parte de su familia.
En las diversas salas el visitante siempre encontrará algo sorprendente. Un imponente fragmento de colmillo de mamut en la sala Geológica. Gavilanes, garzas, ardillas, águilas reales fascinarán a los niños y adolescentes en la sala Medio Físico II. Una serie de diez pinturas coloniales sobre la Virgen María, del maestro Miguel Cabrera, causarán admiración en el vestíbulo de la planta alta. En la sala Arqueológica figura una cota de malla española del siglo XVI, ejemplar único a nivel nacional. La sala Colonial presenta una gran maqueta de la catedral de Durango. La mesa donde Benito Juárez firmó papeles oficiales a su paso por Durango es parte de la sección Las Leyes de Reforma.
Del acervo del siglo XX figura una enorme y excelente fotografía de don Porfirio Díaz tomada por Pablo Virou en enero de 1910 y una colección de armas de la Revolcuión.
EL COLMILLO DE MAMUT
Un imponente fragmento de colmillo de este extinto mamífero puede apreciarse en la sala Geológica.
Ubicación: Victoria 100, esquina Aquiles Serdán.
Horario: Lunes a viernes de 8 a 15 horas.
Entrada libre.
Teléfono: (01618) 812 5605 / 813 1094.