Alegre y sencilla población que surgió hacia fines del siglo XIX como campamento para los obreros que construían la línea del ferrocarril.
Tiene tranquilas callejuelas y modestas construcciones que recuerdan la actividad comercial que tuvo. Es famosa por sus muebles de madera labrados y sus célebres bastones, que posiblemente recuerdan a los báculos de mando que portaban los antiguos señores indígenas.
Ubicación: A 21 km al noreste de la ciudad de Tlaxcala.