Llegar a este maravilloso Pueblo Mágico, con su clima caluroso y con sus voladores en la plaza principal, es la mejor bienvenida. Esta danza, que existía desde 500 años antes de la conquista, es un rito para invocar la fertilidad de la tierra. El caporal, quien está al centro, invoca los cuatro rumbos. Después de que ha tocado los sones correspondientes, se sienta y los voladores saltan. En Papantla existen varias escuelas de coladores, a las cuales los niños ingresan desde los cinco años. Muchas familias tienen tradición de dedicarse a la danza por generaciones. Recientemente, una de las escuelas comenzó a aceptar mujeres entre sus alumnos. Además del oficio de volador, los niños aprenden en estas escuelas a elaborar artesanías con vainilla, instrumentos como tambores y flautas de carrizo y la misma vestimenta tradicional que se usa para esta danza. Este ritual no es el único importante en la región. Otra danza prehispánica que aún se practica aquí es la de los guaguas, al igual que la de los negritos, la de los moros y cristianos y la de los santiagueros, creadas durante la Colonia.
La Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción es una construcción franciscana de 1700 y llama la atención el detalle de las cenefas de madera decoradas con motivos de plantas de vainilla y el símbolo de Nahui-Olín, el quinto sol de la cosmogonía náhuatl, que representa el movimiento. Durante la fiesta de Corpus Christi, la más importante de la ciudad, se construyen en el atrio de esta iglesia cuatro altares temporales que están en relación con los cuatro barrios y los cuatro rumbos.
A un costado de la iglesia se encuentra el Mural Escultórico de la Cultura Totonaca. En esta obra de Teodoro Cano se muestra la evolución de esta cultura enmarcada por una enorme serpiente emplumada. Es interesante observar el símbolo de Nahui-Olín, como una prueba más de que la cosmovisión prehispánica sigue vigente en esta zona del país. En el quiosco del mismo parque se encuentra otro mural de Cano, el Cerro del Campanario, en donde está el monumento al volador..
Otros sitios de interés turístico en Papantla son la Capilla de Cristo Rey, que es una pequeña copia de la catedral parisina de Notre Dame; el Museo de la Ciudad; y el Museo Teodoro Cano donde se exhiben colecciones de piezas prehispánicas de barro, pinturas con diversas técnicas y otras obras del propio maestro Cano y estudiantes del taller de artes de Papantla.
Papantla es famosa por su vainilla, y se puede conseguir extracto, vainas, helado y artesanías hechas con vainilla. El mercado Hidalgo es un buen lugar para realizar estas compras.