Este sencillo pueblo de origen minero tiene muchísima historia, sobre todo si tomamos en cuenta sus pequeñas dimensiones. Sus atractivos son valiosos, pues conserva interesantes muestras de arquitectura y arte virreinal, así como agradables jardines y un invernadero de primera. No obstante, lo que más disfrutan los visitantes es el cariño y el empeño respetuoso que ponen sus pobladores al compartir toda la riqueza de Asientos.
Frente al jardín principal o Plaza Juárez se encuentra la Parroquia de Nuestra Señora de Belén, adentro del atrio es de llamar la atención la casa cural anexa a la fachada de la parroquia, pues tiene zaguán y patio, y las ventanas de la parte superior parecen puertas suspendidas en el aire.
Dentro, la nave tiene los colores característicos de las iglesias del estado: rosas, azules, verdes y morados pálidos, plasmados con empeño. Ahí se puede ver una sorprendente figura articulada de Cristo que, al parecer, tiene cráneo, costillas y dientes humanos. Hasta hace unas décadas también tenía pelo natural. Fue traído de España hace casi quinientos años y, por si fuera poco, sigue a sus visitantes con la mirada.
Junto a la iglesia está la entrada a la Pinacoteca, donde se guarda una colección de pintura virreinal que resulta asombrosa para un pueblo tan pequeño. Uno de los óleos es del famoso pintor Miguel Cabrera, y hay otro de un tal Osorio que tiene peculiares ilusiones ópticas.
El acueducto escondido de Asientos se construyó a finales del siglo XVIII para filtrar el agua, llevarla hasta el río y evitar inundaciones. Lo curioso es que no se sabía de su existencia hasta 2001, cuando se descrubrió mientras se hacían reparaciones en la iglesia. En sus corredores se pueden ver nichos con imágenes religiosas y un ojo de agua.
El Santuario de Guadalupe fue construido a mediados del siglo XVII. Por esas fechas hubo una epidemia y tuvo que construirse un nuevo cementerio detrás de la iglesia, es de llamar la atención su estructura, con basamentos de un metro de altura, donde se acomodan los nichos. En ellos se sepultaba a las personas de “mayor rango”, como los sacerdotes y los ricos, mientras que los restos de los pobres se enterraban en tumbas en la parte superior.
Hoy éstos se han puesto en un osario, y en su ubicación original se han sembrado cactáceas que le dan un aspecto genial al conjunto. Es para sorprender a cualquiera las pinturas que están en el muro del templo ya que muestran el juicio final con colores tenebrosos, y prácticamente no se sabe nada de su autor.
Se puede llegar a pie desde el centro al Museo Vivo de Cactáceas, se debe hacer cita previamente ya que no siempre está abierto. Se localiza donde comienza la cuesta que lleva la Capilla del Cerrito, frente a la Casa de la Cultura. Está organizado con gran cariño y sus dependientes saben mucho de las 60 especies de cactáceas que ahí exhiben, algunas de las cuales dan flores de apabullante belleza.
El Piojito es un simpático tren compuesto por vagones pequeños jalados por un tractor. Este peculiar tren te paseará por diferentes sitios atractivos como el Camino Real de Tierra Adentro (la vía que conectaba la Ciudad de México con el norte durante la Colonia, y que hoy es Patrimonio de la Humanidad), el Tiro del Coyote, una de las primeras minas del lugar, y el galerón de los esclavos africanos, traídos a Asientos para trabajar las minas a finales del siglo XVI.
El Tepozán es un monasterio franciscano del siglo XVII, el templo ostenta una bonita puerta de madera y frescos de gran calidad; el convento, de interesante arquitectura, es hoy un museo. Exhibe cuadros, retablos, reliquias, instrumentos autóctonos y una sala dedicada a los esclavos.
En la Ex Hacienda de Letras se elaboran desde hace casi 40 años los vinos más famosos del estado. Se puede solicitar previamente una degustación.
Imperdible:
Sorprenderse con las flores de las cactáceas en el Museo Vivo.
Visitar el Ex Convento del Tepozán y conocer la historia de los esclavos africanos.
Comprar dulces típicos de leche y guayaba.
Pasear bajo la tierra en el acueducto subterráneo.
Admirar la extraña estructura del Cementerio de Guadalupe.
Hacer el recorrido en El Piojo.
Cómo Llegar:
Desde Aguascalientes tomar la autopista 45 hasta San Francisco de los Romo. Allí incorporarse a la federal 71 hasta llegar al entronque que conduce a Tepezalá, Asientos y Loreto.
Festividades:
La Fiesta del Señor del Tepozán, el primer domingo de julio. En esas fechas también se celebra el Día del Minero.
La Fiesta de Enero o de Nuestra Señora de Belén, patrona de Asientos.
La Exposición agrícola y ganadera el último domingo del mes.