El Templo Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús se encuentra al oriente sobre la Avenida Juárez en la esquina con Avenida Hidalgo.
Este templo se comenzó a construir en 1747 y en un principio se conoció como el Templo de la Santa Escuela.
Como fue el caso de otros edificios religiosos del país, pasó a manos del gobierno con las Leyes de Reforma del siglo XIX.
Durante un tiempo fue utilizado como escuela para adultos, y más adelante, el gobierno lo privatizó (1904) y los ciudadanos que lo compraron lo devolvieron a la Iglesia Católica.
En el año de 1906 reabrió sus puertas como Templo Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús.
Antes de reabrirlo el arquitecto Dámaso Muñetón lo restauró dándole un nuevo aspecto ecléctico de aire afrancesado tanto en su interior como en el exterior.